Helado de Fresa con Leche Condensada: ¡La Receta Más Cremosa y Dulce del Verano!
Ingredientes:
500 g de fresas frescas o congeladas
1 lata de leche condensada (397 g)
200 ml de nata para montar
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 cucharada de azúcar (opcional)
Instrucciones:
Lava bien las fresas y córtalas en trozos pequeños si son frescas. Si usas fresas congeladas, déjalas descongelar un poco.
Coloca las fresas en una licuadora o procesador de alimentos y tritura hasta obtener un puré suave. Si prefieres trozos de fresa en tu helado, guarda algunas fresas picadas para añadir al final.
En un bol grande, mezcla el puré de fresas con la leche condensada y la esencia de vainilla. Si prefieres un helado más dulce, añade una cucharada de azúcar.
En otro recipiente, bate la nata hasta que esté bien montada (pero no demasiado firme). Incorpora la nata a la mezcla de fresas con movimientos suaves para mantener la textura aireada.
Vierte la mezcla en un molde apto para congelar y cúbrelo con plástico adherente. Deja congelar durante al menos 4 horas, o hasta que esté bien firme.
¡Listo! Sirve el helado de fresa en copas o conos y disfruta de su sabor cremoso y delicioso.
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de congelación: 4 horas
Porciones: 6 personas
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